Golden State Warriors, pase directo a las finales de la NBA.

 Los Warriors se coronaron hoy como los nuevos campeones de la conferencia del oeste y aseguraron su lugar en las finales de la NBA después de ganar 120 a 110 a los Dallas Mavericks, superándolos de forma contundente y llevándose la serie en solo 5 juegos.

Los Mavs llegaron con grandes expectativas después de dejar fuera al equipo con más victorias en la temporada regular, los Phoenix Suns. Contando con el serbio Luka Doncic jugando como si estuviera poseído y anotando cantidades increíbles de puntos en cada partido de playoffs y el resto de los jugadores respondiendo de gran forma se esperaba una serie mas competitiva. Entonces, ¿qué fue lo que paso?

El equipo de Golden State se impuso en todos los ámbitos posibles dentro de la duela, esto se puede atribuir a dos factores muy importantes que son la experiencia y el maravilloso coacheo de Steve Kerr.

Vayamos por partes, primero, la experiencia. Los Warriors han estado presentes en 6 de las ultimas 8 finales de la NBA (contando esta ocasión), siendo una costumbre para ellos estar en estas instancias, pero sobre todo conocer lo que es manejar la presión de estar en la antesala de las finales. Mientras que los guerreros se mostraban con confianza y disfrutando de cada posesión en la cancha, los jugadores de los Mavs se veían erráticos y hasta cierto punto con miedo de atacar la canasta o de tirar, se mostraron tibios, poca intensidad y mucha frustración llevaron a este grupo a fracasar. Dallas fue irregular y hasta cierto punto se noto la inmadurez tanto de los jugadores como del coach Jason Kidd, dejaron ir ventajas grandes como en el juego 3 donde lideraban por mas de 15 puntos y terminaron perdiendo, además de aferrarse a su estrategia de vivir del triple la cual no les funciono y los liquido por completo.

Segundo punto, la estrategia. Steve Kerr demuestra porque es uno de los mejores entrenadores en la liga. Puede parecer una simple coincidencia, pero es obvio que no lo es, los Warriors atacaron constantemente las debilidades de la franquicia texana. Ante la falta de un centro dominante de los Mavs, Kevon Looney fue amo y señor del área pintada tomando cuantos rebotes quiso tanto en el costado ofensivo como defensivo, promediando 10.6 rebotes por encuentro y llevándose 18 en el ultimo juego de la serie. 

El equipo de Golden State no dependió de una sola estrella, Curry destaco como siempre y se llevo el MVP de las finales de conferencia, pero realmente su estrategia fue lo que alimento a todos los tiradores y permitió repartir el trabajo a la ofensiva. De forma constante los jugadores de la bahía ganaban en el primer paso a la defensiva perimetral de Dallas dejando atrás a su marca, provocando que la defensa se desequilibrara y siempre existiera un compañero listo para tomar un tiro abierto o encestar una canasta fácil debajo del aro. Wiggins y Thompson levantaron la mano con sus 18.6 y 18.4 puntos por partido respectivamente, volviendo imposible la tarea de detener a una ofensiva tan versátil y poderosa de los guerreros de Golden State.

 

Termina el sueño para unos jóvenes Mavericks con un fututo brillante y el caminó continua para unos Warriors que apuntan a un titulo mas de la NBA para poder consagrase como una de las dinastías de la liga. Ahora solo les queda esperar a definir su rival entre el Miami Heat y los Boston Celtics, sin importar quien sea el representante de la conferencia del este sin duda será una final espectacular. 

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